Tener es ser o porque más es menos

Si algo hay que abonarles a las redes sociales es su capacidad de posibilitar interacciones entre los individuos, sin embargo este exceso de interacción está llevando en muchos casos a crear un ambiente de desasosiego en donde ya nada nos satisface.

Para Erich Fromm psicólogo social, el hombre se convertido en una maquina, donde el consumo es cotidiano y la falta de racionalismo lo lleva a una perdida de si mismo y de su propia identidad. Esta semana leía un articulo titulado “¡Uff! qué montón de amigos en Facebook” en donde se planteaba que el cerebro humano tiene capacidad para mantener únicamente 150 relaciones significativas” frente a esta hipótesis surge una pregunta y es como interactuar de manera adecuada y no desfallecer en el intento?. A continuación les comparto un video que aparte de recomendar algunas herramientas para hacer seguimiento a nuestra vida virtual pone de manifiesto lo que puede pasar cuando esta vida virtual deja de tener sentido.

Frente a estas nuevas dinámicas sociales en donde nos ahogamos en nuestras posibilidades que tenemos a nuestro alcance, considero necesario hacer una pausa y revisar como simplificar un poco nuestras vidas; a propósito me acordaba al reflexionar sobre este tema del elogio de la lentitud un exquisito texto de Carl Honoré que nos invita a ir mas suave y no caer en la enfermedad del tiempo que nos está reduciendo y absorbiendo toda nuestra energía.

Seguramente en esta enfermedad del tiempo, las tecnologías tienen mucha responsabilidad, y aunque esto no va a parar y cada día nos vamos a ver más agobiados valdría la pena pensar como disfrutar y sacarle un mejor provecho a todo lo que nos ofrece las red sin sacrificar otras cosas ya que “a veces tener más no es sinónimo de mejor”, ahora me despido porque voy a disfrutar un poco de la vida, pero antes l@s invito a que vean esta entrevista con Barry Schwartz, un psicólogo que no aconseja como sobrevivir en esta sociedad marcada por la abundancia.