Empezamos muy temprano; mientras muchos dormían, mercaban, hacían deporte, oraban o llegaban de rumba (como los huéspedes del hotel donde me quedé), nosotros intentábamos provocar una conexión de neuronas en los asistentes para detonar como nos los propusimos ideas que generaran verdaderas transformaciones en la escuela, la jornada fue intensa, nos encontramos con directivos apasionados y orientados a generar cambios, docentes inquietos y con ganas de transformar la escuela y empresarios convencidos que los cambios solo son posible cuando hay verdaderos procesos de innovación.
Particularmente me concentré en el empalme de saberes, porque considero que los nuevos tiempos; el de la escuela, el hogar, la empresa y hasta la misma calle han propuesto un nuevo ecosistema comunicacional que de no adaptarnos estaríamos condenados a la desaparición; tal es el caso de la misma escuela en donde no es posible pensar hoy en día en un docente poseedor de todo el conocimiento, este requiere de una conexión de saberes especialmente del estudiante para co-crear verdaderos ambientes de enseñanza-aprendizaje.
En conclusión; ese domingo nos conocimos, reconocimos, exploramos herramientas, sacamos miedos y nos fuimos convencidos de que los cambios solo son posibles cuando pensamos diferentes y nos atrevemos a explorar nuevos usos de
El reto ahora es el “Educamp montería” (nombre aún no oficial) un evento grande organizado por
Los dejo con dos cosas, la primera todos mis agradecimientos a las personas que hicieron posible mi participación en este DELM y la segunda la presentación que hice en este espacio y un video para reflexionar sobre la necesidad de inyectarle cierta dosis de locura a nuestras vidas.
Aquí algunas imágenes en DELM Montería